¿Qué tendencias en tecnologías y servicios de ciberseguridad predominarán a lo largo del año 2022?
La tendencia predominante es la relacionada con los ataques que se han venido produciendo en 2021. En este sentido, continuaremos asistiendo a un incremento de ataques de ransomware con una evolución hacia un triple chantaje. En 2022, no solo se pedirá rescate por la clave de cifrado, sino que –en caso de no ceder ante dicho chantaje–, pasarán a publicar los datos de la empresa atacada en la Dark Web o en foros especializados; y, como novedad, se añade que también amenazan con vender los datos de la organización atacada a su competencia.
Por otro lado, asistiremos a un incremento de ataques en el entorno industrial y de infraestructuras críticas, así como en el sector sanitario. Esto se traducirá en el auge de proyectos para proteger los dispositivos tanto de OT, como IoMT [Internet of Medical Things] e IoT. Precisamente, en este último ámbito veremos los primeros ataques contra dispositivos de IoT del sector del automóvil, ligados al coche conectado.
Finalmente, cabe destacar que se incrementarán los ataques para robar datos que las empresas han subido a la nube, dirigidos especialmente hacia los operadores que mantienen las infraestructuras de almacenamiento de datos corporativos.
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¿Cuáles diría que serán las principales ciberamenazas a las que tendrán que hacer frente las organizaciones?
Este 2022 se van a dar tres tipos de amenazas principalmente. En primer lugar, los ataques de robo de credenciales; en segundo término, los ataques de denegación de servicio y, en tercera posición, veremos las ciberamenazas de ransomware. Todo ello sin olvidar que también se producirán durante estos meses campañas de phishing.
¿Qué novedades presentará su compañía a lo largo de este año para hacer frente a las ciberamenazas y necesidades de las organizaciones?
Sin dejar de lado ninguna de nuestras soluciones, en Ingecom creemos que este año es el más indicado para potenciar el área de inteligencia. Igualmente, el mercado demandará tecnologías que eviten ataques en el entorno OT, IoT e IoMT, este último pensado para el sector salud.
