"Gobiernos y empresas tendrán que trabajar juntos"

¿Cómo creen en Google que será la ciberseguridad dentro de dos décadas, tanto en lo que se refiere a la protección como a las amenazas?

La ciberseguridad está en constante evolución, por lo que es difícil predecir cómo será dentro de dos décadas. Sin embargo, es probable que las amenazas cibernéticas se vuelvan más sofisticadas y difíciles de detectar y prevenir. Los ciberdelincuentes seguirán encontrando nuevas formas de explotar las vulnerabilidades de los sistemas informáticos y de robar datos personales y financieros.

Para hacer frente a estas amenazas, será necesario seguir invirtiendo en ciberseguridad y adoptando nuevas tecnologías y soluciones. Los gobiernos y las empresas tendrán que trabajar juntos para desarrollar normas y protocolos de ciberseguridad eficaces. También será necesario concienciar a los usuarios sobre los riesgos de la ciberseguridad y cómo pueden protegerse.

Es probable que la ciberseguridad se centre en los siguientes aspectos en los próximos 20 años: seguridad de la nube, Inteligencia Artificial, ciberseguridad cuántica, ciberseguridad 5G e IoT y regulación.

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¿Qué valor aporta su compañía en el presente de la ciberseguridad y qué papel va a jugar en el futuro?

Google es una de las empresas más importantes en el sector de la ciberseguridad, adquirida por su gran experiencia en la protección de servicios billonarios expuestos en Internet. Ese conocimiento es ofrecido a clientes principalmente a través de Google Cloud en forma de productos y servicios como VirusTotal, Chronicle, Mandiant o GCP. En ese sentido, Google seguirá jugando un papel relevante en la protección, detección, respuesta, prevención, disponibilidad, etcetera, en la nube y en el IT del cliente, con especial atención en el uso de Inteligencia Artificial y automatización en la mayoría de las tareas. Las capacidades de Zero Trust y los modelos de desarrollo seguro serán cada vez más puestas en valor y los stacks intrínsecamente inseguros (sistemas operativos con permanentes vulnerabilidades) darán paso a entornos seguros por diseño que disminuyan la exposición a ‘epidemias’ como el ransomware, frente al que no parece que estemos ganando la batalla.