Usted tomó posesión como presidente de @aslan hace apenas unos meses. ¿Cuáles serán las principales líneas maestras que seguirá su junta directiva en esta nueva etapa de la asociación y los objetivos que se han marcado tanto a corto como a medio y largo plazo?
Como ya formaba parte de la anterior junta directiva, bajo la presidencia de Ricardo Maté, he participado en un plan que creo que ha sido muy exitoso y con un impacto muy positivo en los últimos cuatro años. Además, como soy ingeniero, y en ingeniería siempre decimos que no se debe tocar lo que funciona, va a haber un alto componente de continuismo.
Nuestra primera misión es identificar tendencias tecnológicas. Y sobre ellas, elaborar estudios y difundirlos. Somos una asociación profundamente divulgativa que lo que pretende es, gracias a la identificación de esas tendencias, inspirar las agendas digitales tanto del sector público como del privado y favorecer la cooperación entre ambos para conseguir cambiar el modelo económico de país.
Pero también debemos afrontar retos coyunturales. Y aquí hemos identificado varios. El primero, y el más importante, es la oportunidad que suponen los fondos Next Generation, donde lo digital tiene un papel muy protagonista. Es cierto que ahora mismo hay impedimentos porque es tan ingente la cantidad de fondos, que faltan manos dentro del sector público para poder aterrizarlos. Aquí es donde queremos jugar un papel fundamental como asociación. En concreto, identificando, por un lado, los casos de uso que sean aplicables a esos fondos; y por otro, los que sean realmente transformadores y que ayuden a disrumpir el modelo económico y social español. Pero también existe otro miedo: la justificación de esos fondos. Hay un proceso arduo de contratación y aquí también queremos ayudar. Por ejemplo, en febrero presentamos una serie de recomendaciones al sector público para aligerar los procesos de contratación.
Otro gran desafío es la falta de talento digital. En este momento, existen unas 140.000 vacantes en el sector tecnológico sin cubrir en España. Por tanto, se necesita acelerar la formación de profesionales. Además, se debe hacer de forma colaborativa entre el sector público y el privado. Pero lo que acelerará esos procesos formativos es que parte de ellos se lleven a cabo dentro de las propias empresas. Desde la asociación también estamos impulsando esto.
Por último, existen otros retos relacionados con la irrupción de nuevas tecnologías. La inteligencia artificial es, quizás, la más manida. Aunque también destaca todo lo relativo a la ciberseguridad y la ciberresiliencia. Asimismo, están surgiendo nuevas normativas, y como industria digital debemos ser capaces de incidir en esa regulación para que ayude a respetar derechos y, a la vez, no sea un freno para el desarrollo competitivo.
Durante 2023, la Asociación @aslan llevó a cabo cerca de 60 actividades en la que participaron más de 12.500 profesionales del ámbito tecnológico. ¿Cuáles serán los proyectos y las iniciativas que marcarán este año?
Quizás la actividad más conocida sea el Congreso&Expo. Pero la asociación, como he comentado, tiene la vocación de identificar tendencias tecnológicas, de realizar estudios en torno a ellas y de llevar a cabo una labor divulgativa. En este sentido, cuenta de manera muy activa con una Comisión de Relaciones Institucionales que articula toda la relación con el sector privado. De hecho, es miembro de la CEOE [Confederación Española de Organizaciones Empresariales]. Aunque también tiene una Comisión de Relación con las Administraciones Públicas para llevar las tendencias identificadas al sector público.
Para ello, la asociación utiliza diferentes vehículos. Uno de ellos son los Foros Tendencias, donde se presentan y comparten los estudios que elabora @aslan. Otros son los Tours Tecnológicos, gracias a los cuales se acerca la tecnología a las principales ciudades de España. Luego existe un fantástico formato, denominado «Almuerzos conociendo a», en el que un representante público o privado de un determinado vertical cuenta qué tipo de proyectos se están abordando y qué presupuesto se está destinando.
Otros eventos más relacionados con el networking son los encuentros anuales de directivos de la industria digital en Madrid y Barcelona, la regata de vela y el torneo de golf.
Finalmente, y esto es una novedad reciente, hemos visto que, igual que falta talento digital en general, también necesitamos elevar las capacidades del entorno directivo en el sector tecnológico. Por ello, la asociación ha llevado a cabo programas muy rápidos y ágiles de formación directiva para abordar varias necesidades. Por ejemplo, en lo relativo a la comunicación empresarial.
¿En qué trabajará concretamente la asociación en el campo de la ciberseguridad?
La ciberseguridad ocupa un papel destacado dentro de las comisiones tecnológicas de @aslan. De hecho, al igual que la inteligencia artificial, se ha convertido en algo totalmente transversal.
Dentro de este ámbito, si bien tecnológicamente existe un nivel de protección cada vez mayor, todavía hay dos vectores en los que se debe incidir más. El primero son las personas. Muchos de los ciberincidentes exitosos son consecuencia de un fallo humano. Como asociación podemos realizar una labor de concienciación a nivel social para evitar esto.
El segundo es la continuidad. Es decir, una vez que los ‘malos’ han entrado, asegurar que la actividad del negocio no se ve afectada y, por tanto, poder dar una respuesta rápida. Esto también es algo que queremos potenciar dentro de @aslan.
¿En qué estado diría que se encuentra el sector tecnológico en general y el de la ciberseguridad en particular, sobre todo teniendo en cuenta el gran número de empresas que operan en el mercado?
En el ámbito tecnológico en general ha habido cierta concentración. La tecnología se ha vuelto cada vez más sencilla de utilizar por parte del usuario, pero eso ha conducido a que la complejidad tecnológica que hay detrás sea cada vez mayor y creciente. Por tanto, es muy difícil para una compañía tener todos los recursos necesarios para ofrecer la solución completa que el mercado requiere, lo que fuerza procesos de concentración.
En España existen más de 10.000 compañías dentro de lo que podríamos denominar canales de distribución IT. Un número, en términos porcentuales, mucho más alto que en otras economías de nuestro entorno. Y esto conduce, en multitud de ocasiones, a esa gran lacra de nuestra economía: la falta de productividad. Aquí de nuevo surge el término de concentración. Antes era muy difícil encontrar en España compañías de nuestro sector que facturasen más de 200 millones. Ahora empieza a haberlas.
Por otro lado, y aquí @aslan debe jugar un rol muy importante, se está fomentando que las empresas que en un momento dado puedan competir en un proyecto, en otros colaboren.
Luego, en el área de la ciberseguridad, es verdad que ha habido una hiperespecialización en áreas muy concretas. Por tanto, al igual que en el sector tecnológico en general, habrá tanto procesos de concentración como un espíritu colaborativo cada vez mayor entre compañías.
«Si bien tecnológicamente existe un nivel de protección cada vez mayor, todavía hay dos vectores en los que se debe incidir más: las personas y la continuidad de negocio»
La inteligencia artificial está presente en todos los ámbitos de la sociedad, en las últimas novedades tecnológicas y en las soluciones de ciberseguridad más recientes. ¿Estamos cerca de ver el punto máximo al que puede aspirar esta tecnología o todavía le queda recorrido?
Yo soy ingeniero de telecomunicaciones y de la misma promoción que una de las mayores expertas a nivel mundial en inteligencia artificial, Nuria Oliver, y por aquel entonces ya había un interés especial en esto. Eran mediados de los años noventa. En aquellos momentos ya hablábamos de redes neuronales y de muchos de los paradigmas relacionados con la inteligencia artificial que ahora todos conocemos. Aunque es verdad que no teníamos las capacidades de cómputo, las comunicaciones, la gestión del dato ni el almacenamiento de hoy en día.
Pero cuando analizamos la inteligencia artificial actual, vemos que hemos intentado emular aquellas áreas del funcionamiento del cerebro humano que conocemos. El problema es que hay una enorme cantidad de mecanismos de nuestro cerebro que desconocemos. No sabemos cómo funciona el pensamiento intuitivo, que es el que está detrás de las grandes decisiones, sobre todo de las más acertadas. Tampoco los mecanismos de creatividad o la empatía. Por tanto, es muy difícil replicar todo esto a nivel cibernético. Aunque sí supone un gran avance poder disponer de estos asistentes.
El éxito de la inteligencia artificial es contar con soluciones verticalizadas. Además, en áreas como los servicios gestionados, está siendo un poderosísimo asistente.
Entre las tecnologías a las que se dedica la Asociación @aslan se encuentran ámbitos como Intelligent Networks, Data Management & Artificial Intelligence, Cloud & Data Center y Digital WorkSpace. ¿En qué aspectos está evolucionando más la ciberseguridad?
En el caso de la ciberseguridad, hay dos avances en paralelo: el de los atacantes y el de los defensores. Y es verdad que, en este último, la inteligencia artificial ha jugado un papel esencial en el avance de los mecanismos de defensa en los últimos años. Porque, en definitiva, si en algo es buena la inteligencia artificial es en la identificación de patrones. De ahí que esté siendo extremadamente eficaz a la hora de reconocer aquellos que pongan en alerta a los sistemas y que permitan hacer una defensa eficaz. Por este motivo, la inteligencia artificial empieza a formar parte de todas las soluciones de ciberseguridad.