Incibe gestiona más de 97.000 incidentes de ciberseguridad en 2024, un 16,6% más que el año anterior

Desafíos de ciberseguridad de Interior.
Redacción

El Instituto Nacional de Ciberseguridad (Incibe) ha presentado su balance de actividad en ciberseguridad correspondiente a 2024, registrando un total de 97.400 incidentes gestionados a lo largo del año. Esta cifra representa un aumento del 16,6 por ciento en comparación con los datos de 2023, consolidando la tendencia al alza en ciberataques y amenazas digitales en España.

Según Incibe, este incremento en el número de incidentes responde a diversos factores, entre ellos, la creciente sofisticación de las técnicas empleadas por los ciberdelincuentes. En particular, el uso de inteligencia artificial en la generación de ciberataques ha permitido a los delincuentes realizar campañas más dirigidas y difíciles de detectar.

Además, el aumento del teletrabajo, la digitalización de empresas y administraciones públicas, y la proliferación del Internet de las Cosas han contribuido a ampliar la superficie de ataque, exponiendo a más usuarios y organizaciones a posibles riesgos.

Iniciativas de Incibe para combatir el cibercrimen

Para hacer frente a esta creciente amenaza, Incibe ha reforzado su labor de asistencia a ciudadanos y empresas a través de la línea de ayuda en ciberseguridad 017, que atendió 98.546 consultas en 2024, un 21,8 por ciento más que en 2023, a través de su teléfono, WhatsApp, Telegram, formulario web y atención presencial. En concreto, un 56 por ciento de estas consultas fueron preventivas, resolviendo dudas antes de que ocurrieran incidentes, mientras que el 44 por ciento ayudaron a las víctimas a mitigar daños una vez ocurrido el incidente.

Entre las principales preocupaciones de los usuarios, destaca que un 14 por ciento contactaron con la línea de ayuda en relación a algún tipo de suplantación de identidad digital; un 11 por ciento de las consultas de menores fueron solicitando ayuda y asesoramiento sobre casos de ciberacoso; un 47 por ciento de los usuarios recibieron algún intento de phishing, llamada de vishing o mensaje de smishing; y un ocho por ciento de personas necesitaron asesoramiento debido a compras fraudulentas en Internet. Además, Incibe registró 1.544 reportes de contenidos inadecuados relacionados con abuso sexual infantil a través de la hotline de la organización.

Además, el instituto ha puesto en marcha diversas campañas de concienciación y formación para fomentar la cultura de ciberseguridad entre los ciudadanos. Entre las iniciativas más destacadas se encuentran talleres de ciberseguridad para pymes y autónomos, programas educativos en centros escolares y guías prácticas para mejorar la protección de los dispositivos conectados.

Tendencias en las consultas recibidas por el público

A lo largo de 2024, las consultas recibidas por Incibe reflejaron preocupaciones específicas según el perfil del usuario. En el caso de los menores, destaca la inquietud por la privacidad y la reputación online, seguida de la suplantación de identidad, ambas derivadas, en gran medida, del robo de cuentas en redes sociales como Instagram y WhatsApp. Asimismo, las consultas relacionadas con situaciones derivadas del sexting fueron especialmente frecuentes a lo largo del año.

En cuanto a la ciudadanía en general, el vishing fue la principal preocupación, con numerosas denuncias sobre llamadas fraudulentas en las que los ciberdelincuentes suplantaban la identidad de compañías energéticas, entidades bancarias y operadoras telefónicas. A lo largo del año también cobró especial relevancia el smishing. Además, las consultas sobre suplantación de identidad mediante el robo de cuentas en aplicaciones y redes sociales, muchas veces utilizadas en compras fraudulentas, fueron recurrentes.

Por otro lado, en el ámbito empresarial, la principal preocupación fue la suplantación de identidad, que ha afectado especialmente a compañías cuya página web o redes sociales han sido duplicadas o falsificadas con fines maliciosos. A partir de la segunda mitad del año, Incibe observó un crecimiento en las campañas dirigidas a empresas y organismos, con un incremento notable del fraude BEC (Business Email Compromise).

Accede al balance completo aquí.

 

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