Los Estados miembro de la Unión Europea han alcanzado una posición común para incluir una serie de modificaciones en el Reglamento sobre la Ciberseguridad. El objetivo es mejorar la ciberresiliencia de este territorio posibilitando una futura adopción de esquemas de certificación europeos para los servicios de seguridad gestionados.
Los representantes europeos han presentado esta modificación específica junto con una propuesta del Reglamento de Cibersolidaridad. El fin es reforzar las capacidades de ciberseguridad en la Unión Europea. Y, en concreto, ayudar a incrementar la calidad y comparabilidad de los esquemas de certificación europeos para los servicios de seguridad gestionados, fomentar la aparición de proveedores de servicios de ciberseguridad de confianza y evitar la fragmentación del mercado interior.
Modificaciones del Reglamento sobre la Ciberseguridad
Las modificaciones que han propuesto los Estados miembro a la Comisión Europea son las siguientes:
- Aclarar la definición de «servicios de seguridad gestionados» y su adaptación a la Directiva relativa a las medidas destinadas a garantizar un elevado nivel común de ciberseguridad.
- Armonizar los objetivos de seguridad de los esquemas de certificación europeos para los servicios de seguridad gestionados con los correspondientes a otros esquemas en el marco del Reglamento sobre la Ciberseguridad.
- Modificar el anexo de esta última normativa, el cual alberga una serie de requisitos que han de cumplir los organismos de evaluación de la conformidad.
- Incluir varias modificaciones técnicas y de redacción para que las disposiciones pertinentes del Reglamento sobre la Ciberseguridad se apliquen también a los servicios de seguridad gestionados.
La presidencia española del Consejo de la Unión Europea negociará con el Parlamento Europeo sobre estas posibles modificaciones para alcanzar una versión definitiva de la mencionada legislación.
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