Desde el 2016, las estafas informáticas que involucran ciberataques como phishing o ransomware no han dejado de aumentar. Esto se debe a las crecientes modalidades de comercio y las compras online donde el ciberdelincuente ataca al usuario. Además, la cibercriminalidad ha reforzado su complejidad en el segundo trimestre de este 2024 con el aumento de las estafas informáticas. Esto se recoge en el Balance de Criminalidad realizado por el Ministerio del Interior y que cuenta con datos de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, los Cuerpos de Policía dependientes de las comunidades autónomas y los Cuerpos de Policía Local.
Los datos del informe confirman que los delitos de cibercriminalidad han aumentado en este segundo trimestre un total del 9,2 por ciento sobre 2023, registrando 237.640 estafas informáticas. Este tipo de delito sigue liderando la cibercriminalidad española con un incremento del ocho por ciento respecto al mismo periodo de 2023.
Cibercriminalidad: crecimiento de las estafas informáticas
Las estafas han representado el 88,9 por ciento de toda la cibercriminalidad y el 17,3 por ciento de toda la delincuencia anotada entre los meses de enero y junio de 2024. Al mismo tiempo, la evolución de este tipo ciberdelito y su impacto sobre el conjunto del crimen registró en 2016 un total de 70.178 casos, mientras que en 2023 la cifra ascendió hasta 427.448. Como resultado, en apenas ocho años, las estafas informáticas aumentaron un 509,1 por ciento.
De acuerdo a las zonas más afectadas por la cibercriminalidad, las Islas Baleares lideran el ranking con un total del 28,7 por ciento de estafas informáticas. Seguida de la ciudad autónoma de Melilla, con el 26 por ciento; el Principado de Asturias con un 18,3 por ciento; y Andalucía con casi el 15 por ciento de cibercriminalidad.
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