¿Cómo cree que será la ciberseguridad dentro de dos décadas, tanto en lo que se refiere a la protección como a las amenazas?
Es muy complicado anticiparlo a tan largo plazo, aunque sí nos podemos aventurar a dibujar lo que pueden ser las principales tendencias. Según el informe El estado de la ciberseguridad en España de 2022 elaborado por Deloitte, las principales amenazas que están considerando las compañías españolas son el ransomware, el phishing y el malware; aunque también se observa un aumento de otras como el cryptojacking, los web application attacks o los botnets. Estas amenazas seguirán vigentes por mucho tiempo, ya que cambiará la forma en la que son explotadas. De igual forma, el uso de tecnologías emergentes y en constante generalización traerá consigo una nueva familia de amenazas.
En nuestra opinión, tal y como también refrendan los últimos informes de amenazas emergentes publicados por la Agencia de la Unión Europea para la Ciberseguridad, estas amenazas seguirán vigentes por mucho tiempo, ya que cambiará la forma en la que son explotadas. De igual forma, parece claro que el uso de tecnologías emergentes y en constante generalización (por ejemplo, Internet de las Cosas, Machine Learning, Inteligencia Artificial, tokenizacion/blockchain, realidad aumentada, etcétera) traerá consigo una nueva familia de amenazas.
Por tanto, creemos que la manera más efectiva de afrontar este escenario futuro es la anticipación. Desafortunadamente, son muchos los ejemplos que han demostrado la insuficiencia e ineficacia de estrategias de seguridad basadas únicamente en la reactividad. Se debe insistir, por consiguiente, en la preparación y uso de soluciones innovadoras.
A este respecto, se están dando pasos muy positivos en el ámbito público y privado. Se observa una clara tendencia a aumentar la inversión en medios humanos y técnicos, programas de talento en ciberseguridad, iniciativas en I+D+i y establecimiento de redes de colaboración público-privada que permitan eficienciar la preparación y respuesta ante amenazas.
¿Qué valor aporta su compañía en el presente de la ciberseguridad y qué papel va a jugar en el futuro?
Deloitte dispone de una amplia experiencia y de un porfolio de servicios end-to-end de calidad contrastada. Nuestra vocación de contar con el mejor talento y con capacidades más innovadoras nos permiten estar a la vanguardia de la ciberseguridad y, de esta forma, ayudar a nuestros clientes a afrontar cualquier reto presente y futuro.
Nuestro propósito es ser su socio de confianza en materia de ciberseguridad. Somos unos firmes defensores de esta última como herramienta para generar confianza en los servicios digitales y, a la vez, construir una reputación sólida, lo que debe verse reflejado de forma directa en la creación de valor en la cuenta de resultados y en los mercados.