Conforme la digitalización ‘cablea’ el planeta, el ciberseguro se impone como sistema defensivo frente a la delincuencia digital, tanto en el propio ámbito de los seguros como en el corporativo. El parque empresarial español se compone en un 90% de pymes y micropymes, que ya son el blanco preferido de la ciberdelincuencia nacional e internacional. Hablamos de un producto tan nuevo, que quizá ni lo conozcas. Aquí te explicamos qué es y para qué sirve un ciberseguro o seguro de ciberriesgo.
Ciberseguridad: la tercera economía del mundo
El sector de la ciberseguridad se desarrolla con tal rapidez que los conocedores de la materia la definen como la tercera economía del planeta. Según el Informe Digital Global Statshot de 2022, 6 de cada 10 personas usan Internet en nuestro planeta. Y de una población global de 8.000 millones de personas, más de 5.000 millones son usuarios de internet, es decir, un 63 por ciento de la población. De hecho, la cifra de dueños de un dispositivo móvil es ya de 5.320 millones, lo que equivale a dos tercios de los habitantes del mundo. Sin embargo, en paralelo con los avances que nos trae la era digital, se multiplican casi a diario los ciberriesgos y la criminalidad digital.
Ciberseguro: un producto relativamente desconocido
El ciberseguro es un producto tan novedoso que parece casi desconocido para el gran público, pero cada vez lo expenden más compañías de seguros como buena opción de prevención (ante el peligro de un ataque cibernético) y de reacción (en caso de haber sufrido un saqueo digital). Las pymes españolas sufren 7 de cada 10 actos de ciberdelincuencia llevados a cabo en nuestro país. El número de empresas españolas que sufre ‘hackeos’ es muy elevado, y no todas hacen públicos los robos, por lo que la cantidad es mayor que la oficial.
Cuál es la cobertura de un seguro de ciberriesgo
De suceder un ataque digital contra una empresa o institución que tenga un ciberseguro, este cubre los perjuicios económicos propios y de terceros, subsanando la pérdida, el robo o destrucción de datos y/o sistemas electrónicos. La póliza también deberá sufragar la investigación del delito y el retorno de los archivos desplazados o sustraídos.
En la circunstancia de un cese forzoso de actividad empresarial, también costeará el detrimento de ganancias resultante. Asimismo, el ciberseguro asumirá la gestión de la marca comercial perjudicada por el asalto y los rescates que se hayan pagado a los ciberladrones. La obligación principal del seguro abarca los costes de trámite y notificación, en caso de haber terceros perjudicados por el incidente. Las coberturas de terceros incluyen los gastos de defensa frente a denuncias y reclamaciones.
Por qué es necesario un ciberseguro o seguro de ciberriesgo
En este nuevo contexto de veloz avance hacia un ‘cibermundo‘, el sector institucional y el corporativo, incluyendo a los autónomos, tienen que afrontar sin titubeos los retos de la digitalización. El Instituto Nacional de Ciberseguridad (Incibe) asegura que «el riesgo cíber debe ser la máxima prioridad para las pymes y los autónomos.» Las democracias y los regímenes totalitarios en esto son equiparables: la informatización conlleva la ciberdelincuencia. Pero cuanto mayor sea la cultura de ciberseguridad de un país, más protegido estará.
Estrategias de ‘ciberprevención’
Por lo general, el ciberseguro aporta una protección económica consecutiva, que actúa con posterioridad, una vez ocurrido el ciberataque. Pero son cada vez más los seguros de ciberriesgo que ofrecen procedimientos defensivos previos, como las cláusulas relativas a la educación e implantación de una cultura de ciberseguridad en los entornos laborales, para enseñar a afrontar las amenazas inherentes a la digitalización.
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